Hace unos días por fin regresé a Salem junto a las hermanas Sanderson después de casi 30 años y fue un lindo viaje de nostalgia.

Comenzamos la película en un Salem a mediados de los 1600 con unas hermanas Sanderson adolescentes, en el cumpleaños número 16 de Winnie. Y así es como aprendemos la razón y la forma en la que las hermanas se convierten en brujas.

Luego brincamos al presente donde nos presentan a Becca y a su mejor amiga Izzy, que son aficionadas a la brujería y a la tienda de recuerditos que se ubica en la antigua casa de las hermanas Sanderson. Inintencionalmente estas adolescentes reviven a las hermanas durante la noche de Halloween.

Y boom, aparecen en todo su esplendor Bette Midler como Winnie, Sarah Jessica Parker como Sarah y Kathy Najimy como Mary, las hermanas Sanderson. De niña no sabía apreciar lo magnífica que es Bette Midler, pero ahora fue un gozo verla representar este papel de nuevo.

Se podría decir que la película repite viejos chistes pero actualizados. En 1993 cuando las brujas regresan a Salem estaban bien despistadas por todo lo moderno, 29 años después y aunque el pavimento ya no las asuste, siguen estando bien perdidas por las actualizaciones en la sociedad y siempre será divertido verlas tratando de descifrar lo que están viendo. Y se nota que las actrices se la estaban pasando de lujo.

También nos regalaron otro número musical legendario que le hizo justicia al «I Put A Spell On You» de la película original. Fue una de mis partes favoritas de toda la película.

La parte floja de la película fueron las adolescentes, ya que su introducción y la información que nos dieron no se sintió suficiente como para crear una conexión con ellas, o tal vez falta que la vea unas mil veces como hice en su época con Hocus Pocus para sentir esa conexión que sentí con Dani, Max y Allison.

Al iniciar la película esperaba sentir nostalgia y divertirme, pero acabó conmoviéndome muchísimo al final y gracias a eso terminé amándola. Acabé hasta sintiendo empatía por el libro — sí, ese libro con un ojo en la portada — ahhh, me encantó.

Acabé dándole 3.5 estrellas ¿A ustedes qué les pareció?